CASTRACIÓN: mitos y realidades

¿Por qué castrar a las mascotas? La castración (gonadectomía, esterilización, neutralización), que significa la extracción de las gónadas (ovarios en las hembras y testículos en los machos), posee indicaciones y aplicaciones diversas: con fines médicos (como prevención o tratamiento de enfermedades físicas o de comportamiento) o con fines de manejo, como se detalla a continuación.

 

1) Indicación médica:

 

  1. a) Como prevención de una patología física (“Castración preventiva”)

Hembra:

         Tanto las perras como las gatas mantenidas en cautiverio tienen cierta predisposición a desarrollar, en la edad avanzada, patologías reproductivas como tumores de mama, quistes ováricos, o afecciones uterinas. Dada la dependencia hormonal de estas patologías, la ovariectomía (extracción de los ovarios, órganos que sintetizan las hormonas femeninas) a edad temprana es una cirugía de frecuente utilización para  prevenir la aparición futura de estas alteraciones.

         Está comprobado que en aquellas perras que son ovariectomizadas antes del primer celo, disminuye en un 80% el riesgo de aparición de tumores mamarios; entre el 1er y 2do celo, un 68%; y entre el 2do y 3er celo, un 26%. A partir del 3er celo (aprox. 2 años de edad), el riesgo de padecer neoplasias mamarias es equivalente al de la perra “entera” (no castrada).

         Es similar en las gatas, donde aquellas castradas antes del primer celo, o antes del año y medio de edad, tienen casi 0% de probabilidad de aparición de tumores de mama. Si son esterilizadas luego del primer celo (o después del año y medio de edad), el riesgo de padecer patologías mamarias disminuye en un 70% con respecto a las gatas no ovariectomizadas.

Macho:

         Los perros y gatos también tienen riesgo de padecer enfermedades en su aparato reproductor, como tumores testiculares (el 5% de los caninos lo padece, siendo menor la prevalencia en felinos), inflamación, quistes o neoplasias prostáticas y tumores en la zona perineal (alrededor del ano). La mayor parte de estas patologías es hormona-dependiente, y entonces puede prevenirse con la orquidectomía (extracción de los testículos) a edad temprana.

         En los animales criptórquidos (cuando uno o ambos testículos no han descendido correctamente al escroto durante el desarrollo neonatal, y queda retenido dentro del abdomen o el área inguinal), la predisposición a generar tumores testiculares es mayor (13 veces más que un animal normal). Además ésta es una patología altamente heredable, por lo cual no se recomienda la reproducción de los machos criptórquidos. Por eso, en estos casos, SIEMPRE está indicada la castración.

Enfermedades de transmisión sexual (ETS): Los animales domésticos también pueden padecer enfermedades venéreas. Es por eso que la castración temprana actúa como método preventivo:

* Caninos: Existen enfermedades infecciosas que se contagian durante el acto sexual, como la Brucelosis; y otras como el Tumor Venéreo Transmisible, que se contagia por contacto sexual o durante el “cortejo” (olfateos y lamidos del área genital y perineal)

* Felinos: El Virus de Inmunodeficiencia Felina podría tener transmisión venérea, pero sobre todo se transmite por mordeduras, que son frecuentes entre machos enteros (no castrados) que disputan una hembra, o aún entre el macho y la hembra durante el apareamiento. El Virus de Leucemia Felina también tendría transmisión sexual, aunque es más importante su transmisión por saliva en el contacto directo entre gatos sexualmente activos (mordeduras, lamido, acicalamiento mutuo).

 

  1. b) Como tratamiento de una patología física (“Castración paliativa”)

         En las hembras, ante la aparición de una patología ovárica o uterina, y en muchos casos también ante patologías mamarias, se hace indispensable la extracción quirúrgica de las gónadas femeninas, para evitar el estímulo hormonal. De modo similar, en los machos que padecen patologías testiculares, prostáticas o perineales, es necesario extirpar los testículos para eliminar el componente hormonal de estas enfermedades.

 

 

PREVENTIVA

PALIATIVA

VENTAJAS

– Se realiza en un animal sano, sin patología instaurada (menor riesgo anestésico)

– Se realiza en un animal joven (en condiciones físicas y metabólicas ideales para soportar la anestesia y estrés quirúrgico)

– Se puede programar el momento de la cirugía, permitiendo preparar correctamente al paciente y a su familia.       

– Se somete a una cirugía solamente a aquel animal cuya patología actual así lo requiere.

– Se conserva por más tiempo la capacidad reproductiva

DESVENTAJAS

– Se somete a una cirugía un animal que no tiene ninguna patología que la justifique en ese momento.

– Es permanente e irreversible: el animal que se castra ya no tendrá la posibilidad de reproducirse.

– Se realiza en un animal enfermo, con cierto compromiso de sus órganos (mayor riesgo anestésico)

– Se realiza en un animal adulto o geronte, en condiciones físicas y metabólicas más deterioradas

– Suele constituir una urgencia o emergencia, sin posibilidades de preparar correctamente al paciente o a su familia.

 

 

  1. c) Como tratamiento de trastornos de conducta

         En algunas patologías del comportamiento, como agresión por dominancia en caninos, marcaje con orina en caninos o aspersión en felinos, conducta de monta a las personas, etc., es útil la gonadectomía con fines terapéuticos, combinada con otras medidas de tratamiento (Ver “La Consulta Etológica”).

 

2) Manejo

         La castración es el mejor método para controlar la natalidad, las preñeces no deseadas y la superpoblación, tanto para animales “salvajes” (por ej. gatos de la calle, parques o refugios), “semisalvajes” (que viven en la calle pero entran a una casa para comer) o para animales “caseros” que conviven con otros.

         En el caso de las gatas, la esterilización suele ser requerida para suprimir la conducta “ruidosa” y muchas veces molesta, característica de esta especie en la época de celo.

         Muchos propietarios de perra deciden la castración de la misma para evitar el manchado con la descarga vulvar sanguinolenta propia de esta especie durante el período reproductivo.

         Los gatos y perros machos suelen castrarse a edad temprana para evitar la conducta de marcado o aspersión (gatos) con orina dentro del hogar. En el caso de los gatos, la gonadectomía también evita que los mismos se escapen de la casa y anden por los techos, con el riesgo de que se pierdan, se enfermen o regresen lastimados y en mal estado nutricional.

 

¿Cuál es el mejor momento para castrar a las mascotas?

         La esterilización puede realizarse desde edades muy juveniles (6 a 8 semanas), como se suele realizar en los refugios para entregar ya operados a los cachorros que se dan en adopción. Sin embargo lo más habitual es realizarla a partir de los 6-7 meses (una vez alcanzada la pubertad, es decir, luego de la aparición del primer celo en la hembra, o de los signos puberales del macho).

         Los animales que son gonadectomizados a edades muy tempranas, pueden presentar un aumento de la tasa metabólica, con aumento del peso corporal (tendencia a la obesidad), retardo del cierre metafisario (crecimiento óseo) y menor desarrollo de las características sexuales secundarias (genitales externos, tamaño corporal, etc.). Es por este motivo que se suele recomendar la esterilización de animales ya púberes (luego del primer celo), aunque el momento adecuado varía en cada caso y se decidirá de acuerdo al crecimiento y desarrollo de cada animal.

 

¿Es necesario que el animal se reproduzca antes de ser esterilizado?

         La reproducción resulta, en realidad, un “lujo” no indispensable para la vida del individuo (aunque sí necesario para la supervivencia de la especie). Esto quiere decir que ningún animal necesita reproducirse para mantener su estado de salud.

         Se debe desmitificar, entonces, la creencia popular de que si un animal no se reproduce, esto le traerá consecuencias negativas sobre su salud física y/o mental.    Los animales de compañía pueden castrarse aún siendo “vírgenes”, sin que ello perjudique su salud.

         Como en nuestros animales domésticos no existe desarrollo de la psiquis, contrario a lo que ocurre en seres humanos, en ellos no existe “frustración” por no dejar descendencia. Son los propietarios de estos perros y gatos, los que deben decidir si quieren aparear a su mascota, teniendo en cuenta que para ello, al menos en el caso de los dueños de la hembra, deberán hacerse cargo del cuidado de la misma y de sus cachorros, durante la gestación, parto y lactancia.

 

¿Cuáles son los riesgos de la castración?

         Como en toda cirugía, existe un inevitable riesgo anestésico, ya que es un procedimiento que indefectiblemente debe realizarse con anestesia general. Este riego será evaluado por el Profesional ante cada caso, tomando en cuenta la edad, el estado de salud y las condiciones físicas y metabólicas del paciente; y será debidamente informado al propietario. Para evaluar este riesgo anestésico, podrán realizarse exámenes pre-quirúrgicos complementarios a la revisación clínica, como análisis de sangre, radiografías, y todo otro examen que el Profesional actuante considere necesario para arribar a un correcto pronóstico.

 

¿Cómo se realiza?

         La gonadectomía es un procedimiento “de rutina” relativamente sencillo, pero que debe ser realizado sólo por Profesionales aptos y debidamente capacitados. Ud. no debe permitir que una persona “idónea”, aún si trabaja como auxiliar de la práctica veterinaria (criador, paseador, entrenador, enfermero o estudiante), lleve a cabo el acto quirúrgico de su animalito.

         En las hembras, se accede directamente al abdomen a través de un abordaje “por línea media” o “por flanco”, según la técnica elegida por el Profesional para cada caso particular. Por eso es muy importante la asepsia y el uso de material estéril y descartable, para evitar complicaciones e infecciones postquirúrgicas.

         En los machos, si bien sus gónadas son “externas”, existe conexión con la cavidad abdominal, haciendo indispensable también el cuidado de la asepsia.

         Por lo anteriormente expuesto, se deduce la importancia de realizar la cirugía en un quirófano o consultorio debidamente acondicionado, utilizando instrumental y material estéril y descartable. Se desaconseja, entonces, la castración en el domicilio, salvo casos excepcionales (campañas de castración,etc)

 

¿Cuáles son los cuidados postquirúrgicos?

         Si no existen complicaciones, la recuperación de la anestesia suele ser rápida, y los animales en seguida están en condiciones de comer, salir a pasear y jugar.

         En los machos no se realiza sutura del escroto incidido, para evitar la acumulación de líquidos (seroma). En el caso de las hembras, la cicatriz de sutura suele ser pequeña, de apenas algunos centímetros, y necesita la extracción de los puntos pasados 7 a 10 días de la realización de la cirugía.En ambos casos, los animales operados sólo requieren cuidados mínimos de higiene y antisepsia sobre la herida, que serán indicados por el Veterinario. También se administran antibióticos, según prescripción del Profesional.En general no se registra dolor postquirúrgico, pero de ser necesario, el Veterinario prescribirá los analgésicos y antiinflamatorios correspondientes.


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